“Se armó el Belén” fue la primera de las dos películas dirigidas por Sáenz de Heredia para mayor gloria de Paco Martínez Soria, por aquel entonces con una larga carrera en teatro y cine, con un notable éxito de público gracias a sus papeles de pueblerino tozudo pero de buen corazón. Este proyecto vino porque el productor Andrés Velasco quiso relanzar su productora Hidalgo P.C. con un taquillazo, y sabía que la forma más sencilla era dar al público lo que pedía: Paco Martínez Soria. Algo que logró puesto que el film llegó a recaudar 27.761.066 de las antiguas pesetas, o sea 166.849 euros.
La película narra la historia de Don Mariano un cura de ideas anticuadas que es destinado a la parroquia de un conflictivo barrio de Madrid. Intentando atraer a nuevos feligreses, decide renovar sus métodos y modernizarse un poco, lo que provocará una serie de divertidos equívocos.
En Jerez se acaba de montar el Belén y antes de llegar los pastores ya estaba empapelado de carteles de protestas. Las paredes aunque sean de un Belén se han convertido en un usual soporte publicitario, lo mismo sirve para grafiteros que para propaganda electoral, que para cartelitos de ofertas de trabajo con flecos donde figuran números para que el usuario los arranque como si estuviera en la carnicería o en el ambulatorio. El levantar un muro vacío es un peligro porque se corre el riesgo de que al día siguiente aparezca pintarraqueado o empapelado.
El Belén de Cristina no se ha salvado de esta tendencia y esta semana lo hemos visto forrado de folios tal cual tablón de anuncios. El Ayuntamiento jerezano, como Don Mariano, el cura que interpretaba Martínez Soria en la película, está intentando renovar los métodos y modernizarse para atraer a los feligreses, pero no hay dinero ni para el serrín y los conflictos se suceden. Finalmente, se limpió de papeles y se pudo armar el Belén de Cristina que, junto al encendido del alumbrado extraordinario, dan el pistoletazo de salida al ciclo festivo de la Navidad.
Se armó el Belén en Jerez y se armó el Belén tras las elecciones generales del pasado domingo. Ahora toca a otro Don Mariano, pero esta vez Don Mariano Rajoy el colocar cada cosa en su sitio, renovar los métodos y modernizar una nación sumida en una profunda crisis con trabajadores tan parados como los pastores que estos días podemos contemplar en el Belén jerezano de la Alameda Cristina.
Tanto en la nación como en nuestra ciudad la estructura está montada y las piezas disponibles, ahora lo necesario es acertar en la colocación de las figuras para que todo encaje a la perfección sin que ni falte ni sobre nada. Hay que armar el Belén, también en España, sin esperar que lleguen los Reyes Magos. Es necesario destreza y hasta su dosis de arte para que todo salga como debe salir. A Don Mariano, en esta película, le ha tocado tiempos nuevos y difíciles, adaptarse a ellos es tarea complicada pero no imposible. La conflictividad que representa esos carteles pegados al Belén de Cristina debe de ser desterrada para que cuando haya otra vez que desmontar este Belén que se comienza a armar en España, este periodo tenga un final feliz, tan feliz como todas las películas que nos dejó el genial Paco Martínez Soria. Esperemos que así sea.