Todos
los balances que se vienen haciendo estos días sobre la pasada Semana Santa
vienen a coincidir, además del hecho de que el tiempo ha permitido que todas
las Cofradías, salvo el Resucitado,
hayan podido realizar su Estación Penitencial en la catedral jerezana,
la buena acogida que ha tenido entre el público en general el nuevo inicio de
la Carrera Oficial en la plaza Aladro. Jerez parece que ya tiene una Carrera
Oficial más o menos fija lo que permitirá su consolidación con el paso de los
años y, sobre todo, el que las Hermandades puedan fijar e ir acomodando definitivamente sus horarios
a este nuevo trazado.
Una
vez solventado el problema que ha supuesto en estos pasados años la Carrera
Oficial ahora toca coordinar y organizar esa otra carrera que si no tiene
carácter de oficial si va camino de ello. Me estoy refiriendo a la calle
Tornería, una calle que se ha convertido, de unos años a esta parte, en la
preferida de muchos, tanto que se ha
convertido en esencial para el normal desarrollo de la Semana Mayor, hasta tal
punto que si algún año por alguna circunstancias hubiese que cerrarse supondría
un auténtico problema.
El Domingo de Ramos de cinco tres pasan por la
calle Tornería: Borriquita, Perdón y Transporte. El Lunes Santo de cinco cuatro: Paz de Fátima, Sagrada Cena, Candelaria y Cristo de la Viga. El Martes Santo de
cinco tres: Clemencia, Defensión y Cristo del Amor. El Miércoles Santo de seis
tres: Soberano Poder, Consuelo y Prendimiento. En el Jueves Santo pasan las
cinco. La Madrugada de cinco dos: Santo Crucifijo y Buena Muerte y Viernes
Santo también las cinco. A esto le sumamos la de la Sagrada Mortaja que pasa el
Sábado de Pasión y el Resucitado el Domingo de Resurrección. Es decir que, exceptuando
el Sábado de Pasión y el Domingo de Resurrección, 26 de las 36 cofradías que
discurren, de principio a fin, por la Carrera Oficial, pasan por la calle
Tornería o bien de ida hacia plaza Aladro o de vuelta hacia su sede.
La
calle Tornería forma parte del entramado histórico de la ciudad, situada en la
antigua judería sirve de conexión entre las hermosas plazas de Plateros y
Rivero. Sus nobles edificios, muchos de ellos magníficamente restaurados, su
estrechez y altura son las medidas apropiadas para acoger misterios y palios,
humos de incienso y sones musicales, para la belleza de los cortejos y para las
emociones de la bulla. Una calle en donde las cofradías derraman sus esencias y
las cuadrillas sus maestrías. Un magnífico marco para una Semana Santa sin igual.
Todo
esto nos viene a indicar la importancia que ha tomada esta vía urbana para el
normal desarrollo de la Semana Santa y como uno de los enclaves más bellos y
sobresalientes por donde discurren las cofradías en los días procesionales. Motivo,
más que suficiente, para que ninguna Hermandad quiera renunciar a su tránsito
por un enclave tan sumamente cofrade. Pero como todo lo que se masifica y se
sobredimensiona tiene el peligro de salirse de órbita la calle Tornería en
Semana Santa está necesitando ya de vías alternativas que ofrezcan soluciones y
posibiliten recorridos más cortos y fluidos.
La
Unión de Hermandades está en ello. La solución a esta otra Carrera Oficial pasa
por hacer viable la calle Francos desde plaza Plateros, con ello se ganaría una
nueva Tornería, se evitarían atascos y posibilitarían recogidas a horas más tempranas. El empeño merece la pena.
(Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo 27 de abril de 2014 y ayer en VIVA JEREZ).
El Cristo de la Buena Muerte en su primera salida procesional transitando por la calle Francos peatonal. |