Se cumple en este año de 2012 los ciento
cincuenta años del nacimiento de Mariano Benlliure, uno de los más famosos
escultores españoles del siglo XX y autor del monumento al general Primo de
Rivera de nuestra plaza del Arenal. Nació el 8 de septiembre de 1862, en el
Grao de Valencia, en el seno de una familia de amplia tradición artística.
Consultando su biografía podemos leer que fue, un artista precoz, pues desde
muy niño dejó muestra de su don para la escultura. Sus primeros concursos y
exposiciones tuvieron lugar antes de cumplir los diez años.
Comenzó
a cultivar en su juventud una materia en la que ocupa un lugar destacado: la
tauromaquia, con representaciones en bronce de las distintas suertes y
protagonistas del toreo. A los trece años participó en la Exposición Nacional
de Bellas Artes de 1876 presentando un grupo escultórico de cera llamado La
cogida de un picador.
Su
dedicación principal, sin embargo, era entonces la pintura, que siguió
cultivando en París al lado de su maestro Domingo Marqués. En 1879 fue a Roma,
donde, fascinado por Miguel Ángel, abandonó los pinceles para dedicarse
exclusivamente a la escultura. En 1887 se estableció definitivamente en Madrid,
donde, en la Exposición Nacional de dicho año, obtuvo primera medalla por la
estatua del pintor Ribera. Su nombre pronto adquirió fama. Los bustos y
monumentos públicos que realizó son numerosos; entre estos últimos destaca el
del general San Martín, en Lima. Caracteriza su estilo un naturalismo
detallista y minucioso, un impresionismo espontáneo, de modelado nervioso, tan
rápido y vivaz que queda patente en el barro la huella manual del artista. En este
orden alcanzó una maestría prodigiosa. Alfonso XIII le encargó trabajos para la
Casa Real. Ha dejado una producción vastísima. En 1895 obtuvo la medalla de
honor por la escultura del poeta Trueba, instalada en Bilbao. Cultivó además la
imaginería religiosa. Poseía ilustres condecoraciones extranjeras, como la de
la Legión de Honor, de Francia, y la medalla especial del emperador Francisco
José. Fue presidente de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles
durante el periodo de 1929 a 1947.
Mariano
Benlliure ha sido uno de los más grandes escultores que ha dado este país. Fue
un trabajador incansable, humilde y con una genialidad innata.
Su
amplísima producción artística, muestra el talento que atesoró. Gozó de fama,
prestigio y de respeto a lo largo de toda su vida. Jamás menospreció ninguna
tendencia artística con las que compartió contexto histórico. Rompió moldes y
trató temas alejados del tradicional repertorio académico clasicista. Conoció
las tendencias de vanguardia en su época y eligió el camino del Realismo
captado con su particular visión de las cosas. Apostó y ganó.
Han
pasado 150 años de su nacimiento y más de 60 de su muerte pero como todos los
genios, sigue estando vivo. Su obra da fe de ello.
En
Jerez de la Frontera, independientemente de las connotaciones políticas,
debemos sentirnos afortunados y orgullosos de que el monumento más emblemático
de la ciudad sea obra suya. En este siglo y medio de su nacimiento quizás sea
el momento de organizar algún tipo de actos que diera a conocer, a jerezanos y
visitantes, la importancia de su obra y la grandeza de su arte.
(Artículo publicado en Información Jerez ayer domingo 12 de agosto de 2012) |
Mariano Benlliure en su taller ante una de las figuras del monumento a Primo de Rivera.   |
Fotografías publicadas por Clari Dabajo en la página "Cosas jerezanas que se han perdido con el tiempo" de Facebook.
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| Maqueta del monumento al general Primo de Rivera |
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