viernes, 20 de abril de 2012

LOS CÁRMENES DE JEREZ

            
           EN LAS VÍSPERAS DEL ANIVERSARIO DE LA CORONACIÓN CANÓNICA DE LA VIRGEN DEL CARMEN DE JEREZ.

Decía el ilustre don José María Pemán que para conocer las tentaciones, atractivos y misterios de Granada había que meterse a fondo en ella unos días. Había que visitar el estudio de Morcillo, el magnífico pintor que empieza cien cuadros y termina diez; el estudio de Rodríguez Acosta, el Carmen blanco, sensual como una villa romana, recargada de curiosidades orientales; el carmen de la Antequera, donde Manuel de Falla vivió muchos años buscando el silencio. Carmen que conservó amorosamente la duquesa de Lecére, y hoy, revertido al Ayuntamiento, es precioso museo de evocaciones del compositor.

En Granada hay todo eso y mucho más: hay el cura que ha puesto todo el Evangelio en romances gitanos; el maestrante que sale de Corpus en Corpus; el carmen de Conchita, fundación de una muchacha que dejó su casa para capilla y para adorno -¡cómo no!-; tocadores con taracea y cornucopias con espejitos,... Hay como una deliciosa irregularidad latente; una mansa locura genial que vive soterrada de fiesta en fiesta.

Los cármenes de Jerez, también, tienen mucho de aquello que el insigne escritor gaditano utilizó para definir la esencia oculta de Granada. No son los cármenes de Jerez esas deliciosas quintas con huerto y jardín, tan peculiares de la ciudad de la Alambra, para conocer los cármenes de Jerez, hay que sentir los atractivos y misterios de cada 16 de julio, meterse a fondo en ese día. Hay que visitar el templo que se levantó allá por 1727 para honra y gloria de la reina del Carmelo, el Carmen de oro viejo, el Carmen solemne, el Carmen de Rodríguez de Losada y del escultor Rafael Barbero; embelesarse con su tesoro, sus ternos y ornamentos, pertenecientes al Carmen litúrgico de la provincia bética y su buena colección de pinturas de aquel palacio de la calle Francos que un día hospedó a un rey, hermano de un emperador y amante del botellón. El Carmen histórico de aquella Virgen que donó el padre Diego de Gabriel y que hoy sigue recibiendo enorme veneración en su camarín de Carmelo Vicenti, de aquella primera presencia carmelita en el Hospital de la Sangre, su traslado a San Benito, que abandonaron en tres horas, cuando la peste hizo convertir la casa en hospital. Un Carmen generoso de caridad que recibió en agradecimiento los terrenos donde hoy se levanta la suntuosa Basílica. Un Carmen expoliado y de un Carmen acogido en viviendas particulares para hacer aún más cercano lo que nunca ha estado alejado. El Carmen de un vetusto convento, que cayó la picota y que aún recuerda su monumento a la Virgen y los retratos de los venerables padres restauradores, un Carmen en sepia que conserva en la memoria solemnes procesiones eucarísticas por un antiguo claustro primorosamente adornado y un Carmen real con la estancia de unos monarcas para estar presente, un 23 de abril de 1925, en el acontecimiento más grandioso de la historia de esta ciudad, la coronación canónica por antonomasia.

El Carmen de Jerez, es el Carmen del día de fiesta sin importar que sea laborable, es el Carmen con sones de salteras y choques de abanicos. Carmen de costaleros arrodillados y fervorines de medianoche, el Carmen de los escapularios y de los tesoros ocultos que salen a la calle en forma de insignias y estandartes, un Carmen marinero en una ciudad que no es costera, un Carmen con aire patronal sin ejercer patronazgo sobre la ciudad, un Carmen con sabor a súplica en los difíciles momentos y de estampa bajo el cristal de la mesita de noche, amparando sueños.

Son muchos los Cármenes que inundan Jerez cada 16 de julio, el Carmen intramuros, el Carmen medalla de oro, el Carmen que llena cortejo procesional y calles, el Carmen de ayer de hoy y de siempre, sin más y sin menos.

Jerez saca hoy a la calle a su Virgen del Carmen y con Ella la historia de todos sus Cármenes.
 (Artículo publicado el 16 de julio 2005, festividad de la Virgen del Carmen)

23 abril de 1925. Momento en el que el Nuncio de S.S. en España Monseñor Tedeschini corona canónicamente a la Virgen del Carmen en el marco del parque González Hontoria.

1 comentario:

  1. Gran entrada Eduardo, paso por aquí a saludarte amigo, y espero que hayas pasado una buena Semana Santa. Yo no pude salir con el Cachorro por la lluvia, pero he vivido momentos preciosos. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
    http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/

    ResponderEliminar