Entra
el otoño y lo hace, como todos los años, con calor y bochorno, intentando
alargar un verano que se nos va de las manos entre hojas de árboles que se
marchitan y olores a castaña dispuestos a llegar a la Alameda Cristina. Llega
el otoño y con esta nueva estación del año debe cambiar todo, cambiará la hora,
cambiará la ropa, cambiará nuestros hábitos y cambiará la ciudad, con menos
luminosidad pero con más vida por cuanto todo vuelve a la normalidad.
Lo
que no cambia es la situación de crisis de padecemos por mucho que entre el
otoño. Siguen las demandas por el ERE municipal, siguen sin cobrar las mujeres
de Acasa, los bomberos, los empleados de Onda Jerez y tantos otros a los que la
situación económica les está pasando factura. Sin embargo, en este panorama que
se nos presenta a la entrada del otoño, llegan noticias agradables para nuestra
ciudad. Parece ser que, por fin, el Museo Arqueológico municipal abrirá sus
puertas en noviembre, con la buena nueva de que las instalaciones se podrán
visitar de forma gratuita, hasta principios de año, tras las obras y reformas
acometidas en estas instalaciones. Una buena noticia sin duda ya que como
afirmó la propia directora del museo “la historia de nuestra ciudad está
aquí". Ahora solo falta que se rehabilite, de una vez por todas, todo el
barrio que le rodea para que se convierta, este histórico enclave jerezano, en
ese revulsivo cultural importantísimo para la ciudad, que reclamaba nuestra
Alcaldesa.
La
otra buena noticia nos vino esta semana,
el antiguo convento de San Agustín se convertirá en Centro de Negocios,
tras la firma el jueves de un convenio entre Zona Franca, el Ayuntamiento y
Hacienda. El proyecto contempla también la reordenación de plaza Esteve. La
alcaldesa reconoció, durante el acto, los problemas de impago que sufre
Ayuntamiento y los conflictos que ello acarrea, pero destacó que se está "poniendo
orden en las cuentas" y "sentando las bases" para que la ciudad
salga de esta situación. Auguró que aún quedan por delante "dos o tres
meses" de problemas, es decir, que nos espera un nuevo otoño caliente. Por
el contrario anunció que, en breve, llegará a un acuerdo con el Ministerio de
Defensa para la puesta en valor del Depósito de Sementales. A todo esto hay que
añadir la buena noticia de que el
tradicional anuncio del Tío Pepe volverá a la Puerta del Sol madrileña y
que el proyecto de la planta de microalgas de El Portal es ya una realidad. Y
para poner la guinda, el acuerdo mediante el cual queda garantizada celebración
del mundial de motociclismo en Jerez.
Un otoño que ha entrado con sus luces y sus sombras, como
las jacarandas de la Porvera. Esperemos que los frutos sigan apareciendo y que
esas bases que se están sentando no caigan como las hojas otoñales. Ya lo dice
la sabiduría: “No temas al otoño, si ha venido. Aunque caiga la flor, queda la
rama. La rama queda para hacer el nido.”
Que todas estas buenas noticias sirvan, de verdad, para
que la ciudad salga de los bastidores y ocupe su lugar en las candilejas. Esas
luces que deben empezar ya a iluminar el escenario de este Jerez otoñal,
ansioso de disfrutar de una nueva primavera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario