miércoles, 7 de agosto de 2013

ÁNGELES SIN VACACIONES


 
 
Agosto es el mes por antonomasia de las vacaciones, la situación actual no permite a todo el mundo disfrutar de días de descanso, unos por su economía y otros porque sus vacaciones son siempre al no tener trabajo. Pero hay también quienes no disfrutan de vacaciones por su desmedida vocación de servicio a los demás y entre ese grupo humano se nos hace presente en nuestras calles unas mujeres vestidas con toscos hábitos, retando a unas temperaturas a veces insoportables y para quienes el disfrute no es unos días de viajes, de playa o montaña sino que como verdaderamente disfrutan es ayudando a los demás. Me estoy refiriendo a las Hermanas de la Cruz, congregación fundada por Madre Angelita, Ángela Guerrero González, Santa Ángela de la Cruz, Madre de los pobres.   

El día 2 de agosto de 1875 el padre Torres celebraba la Eucaristía en la iglesia del convento jerónimo de Santa Paula de Sevilla, a la que asistían, con Ángela, que era terciaria franciscana, otras tres mujeres, Juana, Josefa y otra Juana, dispuestas a desentrañar el misterio de la cruz en la oración y en el servicio a los pobres. Acabada la misa, se trasladaron a vivir a un cuarto alquilado en la calle de San Luis, n. 13, en el que había una mesa, unas sillas y unas esteras de junco que servían de colchón y de almohada, un crucifijo y un cuadro de la Virgen de los Dolores. Estaban naciendo las Hermanas de la Cruz. Su estilo sería el de mujeres sencillas, verdaderamente populares, apartadas de la grandiosidad, impregnando de tal forma el aire de dulzura, que la gente agradecía aquel nuevo modo de querer a Dios y a los pobres. «Hacerse pobre con los pobres». No quería hacer la caridad «desde arriba» sino ayudar a los pobres «desde dentro». Escribía y lo vivía: «La primera pobre, yo...». Desde el 1 de junio de 1947 están las Hermanas de la Cruz en Jerez.

En esta sociedad actual en la que tanto se habla de lo que deberían hacer los demás con su dinero, de que tanto se critica a la Iglesia por el patrimonio acumulado durante siglos pero se sigue ocultando todo ese otro rico patrimonio humano y de servicio a la comunidad también acumulado durante siglos, las figuras itinerantes de las Hermanas de la Cruz bajo un sol de justicia con sus gruesos hábitos son el contrapunto a unos tiempos donde el bienestar y el confort se impone al sacrificio aunque este sea para cubrir algo de la necesidad del prójimo.

Frente al consumismo y el indiferentismo no hay mejor testimonio que el ejemplo de estas mujeres que, a contracorriente, nos siguen recordando que mientras otros descansan y logran combatir los calores, ellas siguen con su lucha diaria pidiendo limosna para los que menos tienen. En estos días que tanto se ha oído hablar de los capitales de Bárcena, los dineros negros, las comisiones ilegales y en el que el dinero parece ser que para algunos es más bien un fin que un medio, sirva el modelo de Madre Angelita que murió con las manos llenas pero no de cuentas en Suiza sino de amor, vacías de entregar a los demás su vida hecha dulzura, milagro cotidiano de luz.

En el día de la muerte de Madre Angelita el Ayuntamiento republicano de Sevilla celebró sesión extraordinaria para dar carácter oficial a los elogios de Sor Ángela. Hoy las Hermanas de la Cruz siguen fielmente el espíritu de su fundadora, haciéndose pobres entre los pobres, ayudándoles desde dentro como ángeles custodios sin vacaciones.
            (Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo  4 de agosto de 2013)


Madre Angelita rodea por religiosas de la congregación por ella fundada.



Capilla de las Hermanas de la Cruz en Jerez de la Frontera.

2 comentarios:

  1. Debe ser muy difícil renunciar a las comodidades para dedicarse por entero a los demás.

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  2. Cómo se les podría ayudar desde fuera de Jerez? Las recuerdo desde mi niñez pidiendo para los demás. Es la mayor muestra posible de amor. Que gran ejemplo frente al materialismo que nos invade.

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