martes, 30 de octubre de 2012

TABANCOS


 
El Tabanco, según Wikipedia, es una taberna en la que se comercializan alimentos, pero tradicionalmente bebidas como el Jerez y sus destilados. Eran lugares de reunión que pertenecían al circuito de lugares donde se cantaba flamenco y para la promoción de los cantaores. La imagen de un tabanco se compone de un mostrador generalmente de madera, atendida por uno o varias personas mostrando viejos toneles de roble en el que se conserva la bebida. La denominación de tabanco nace a principios del siglo XX, que es cuando figura en documentos, reemplazando la palabra taberna, aunque Cervantes los describe en un poema de su libro "Viaje del Parnaso", al mencionar a la Gitanilla: Nunca se inclina, o sirve a la canalla trobadora , maligna y trafalmeja , que en lo que mas ignora , menos calla. Hay otra falsa, ansiosa, torpe y vieja, amiga de sonaja y morteruelo, que ni tabanco, ni taberna deja.

Por su parte el historiador José Cabral asegura que estos establecimientos aparecieron en el siglo XVII y su nombre es la fusión de dos palabras: tabaco y estanco.  Los estancos, donde se vendían diversos productos cuya producción controlaba el Estado, como el aceite o los vinos y los estancos de tabaco. Juan de la Plata en su libro sobre Tabancos y ventas de Jerez señala que la primera referencia a la palabra tabanco aparece en 1592, rozando el siglo XVII, la fecha que señala Cabral. La referencia aparece en unos documentos municipales encontrados en el archivo municipal.

 Jerez estuvo lleno de tabancos donde los hombres pasaban ratos de charla una vez acabado el horario laboral junto a una copa de vino de las múltiples bodegas que llenaban la ciudad. La Pandilla, La Reja, La Canoa, Navero, El Guitarrón, los número 1, Nono,.. fueron tabancos que marcaron una época entre “morenitas” y almendritas, banquetas de madera y  pequeños urinarios, carteles taurinos y banderitas rojas en otoño. Con el cambio de costumbres y la bajada del consumo del vino  estos establecimientos, tan típicamente jerezanos, fueron cerrando hasta el punto de temer por su total desaparición. El Pasaje, La Tasca San Pablo o La Taberna La Sureña en la calle Puerto fueron de los pocos que sobrevivieron a las nuevas modas de bares con tapas de diseño y uniformes negros para los camareros, siguiendo ellos con sus mostradores de madera y sus botas de fondo como Quijotes de una jerezanía que se veía amenazada con los nuevos tiempos. Por eso cuando nuevos tabancos como el de Plateros o el del Guitarrón de San Pedro han abierto sus puertas recientemente no hay por menos que aplaudir a estos emprendedores que, unido a un mayor interés por parte del Ayuntamiento para potenciar los tabancos como parte de la historia de la ciudad, quizá logre animar a las nuevas generaciones a apostar por el romanticismo de este Jerez que, también, se nos va de la manos.

Muestra de esa recuperación es la presentación, ahora, de ‘Tabancora’, el pasaporte de la Ruta de los Tabancos con el que se pretenden avanzar en la promoción de esta iniciativa enoturística. El delegado de Turismo, Cultura y Fiestas, Antonio Real, en la presentación de esta tarjeta, dio a conocer la elevada demanda de este producto que registra a diario la Oficina de Turismo por lo que es “necesario  invitar al público a conocer la Ruta de los Tabancos de Jerez, espacios únicos que además de recuperar una parte de la historia de Jerez ofrecen nuevas propuestas que van de la mano de las nuevas tendencias de la demanda, en base a la búsqueda de experiencias singulares y auténticas que sigan promocionando el tabanco jerezano”. Quizás ahora que la crisis no permite grandes gastos sea el momento de recuperar el placer de una tranquila charla, con morenita incluida, sin borrar con el codo la cuenta de tiza de nuestra historia que dejó sobre el viejo mostrador  aquel tabanquero de siempre.
(Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo 28 de octubre de 2012 y ayer en VIVA JEREZ)
 
El Tabanco San Pablo en una imagen del pasado.
Arriba fotografía actual del Tabanco La Sureña de la calle Puerto.
 

jueves, 25 de octubre de 2012

EL CARTEL


 
El cartel es una obra publicitaria, no está realizado para ser colgado en nuestra casa sino que su ejecución está orientada a la obtención de la máxima capacidad de atracción y de síntesis conceptual. El cartel es una técnica de difusión de la información que permite llegar a gran cantidad de público, sin necesidad de invertir grandes recursos. Sus posibilidades comunicativas dependen en gran medida de su calidad técnica y estética y de su adecuada ubicación.

La evolución de las artes gráficas ha permitido que el cartel consiga excelentes cotas artísticas. La gran revolución del cartelismo llegó con la aplicación de la litografía y la utilización del color, que permitieron ilustrar de un modo vibrante y con mayor impacto. Entre los cartelistas más notables estuvieron Alfons Mucha, Jules Chéret y Henri de Toulouse-Lautrec, cuyas creaciones se consideraban ya en la época como carteles artísticos.

Un cartel artístico y que reune todo los requisitos mencionados anteriormente es el que esta semana hemos conocido para anunciar la Semana Santa de Jerez. El tradicionalismo cofrade, educado en modales rutinarios, ha impuesto siempre límites a la inventiva o a la originalidad en sus manifestaciones artística, sin embargo es en el cartel de la Semana Santa donde ha existido cierta permisividad en cuanto a estilos y técnicas aunque no por ello se haya salvado de las críticas, muchas de ellas sin conocimientos en la materia.

La historia de los carteles anunciadores de la Semana Mayor jerezana es amplia  y aunque anteriormente ya se habían editado algunos carteles con el tema exclusivo de la Semana Santa no es hasta 1950 cuando, oficialmente, comienza a editarse, por el Ayuntamiento, el cartel de la Semana Santa de Jerez. Antes se llamaba el cartel de Primavera y anunciaba tanto la Feria como la Semana Santa. Aquel primer cartel oficial fue de Francisco Mariscal. Posteriormente llegaron excelentes carteles que eran reflejos de una época y de una Semana Santa muy distinta de la actual. Muñoz Cebrián, Esteve Guerrero, Fernández Lira, dieron vida a carteles pictóricos y Eduardo Pereiras, Diego Romero o Federico Abrines, entre otros, a carteles fotográficos.

            En los últimos años hemos vuelto a los carteles pictóricos y este  año nos llega un cartel con aires impresionistas sobre motivos barrocos como son los que engloba a nuestra Semana Santa. Un cartel de un joven licenciado en Bellas Artes, Antonio Lara Luque, pero con una amplia trayectoria artística. Un cartel impactante que nos viene a decir que cumple perfectamente con su función de "grito en la pared" que debe tener todo lo que se mueve con intenciones cartelistas. Una cartel que el que lo vea fuera de nuestras fronteras va a poder captar la fuerza y la grandeza de una fiesta que se publicita por si sola con unas manos y un clavo, símbolos, además de un Año de la Fe a la que se agarra la cristiandad representado, como no podía ser de otra forma en esta tierra, en las manos de María. Ese clavo y esas manos es tan  Jerez como la torre de la catedral que tantas veces hemos visto repetida en los carteles. El cartel de la Semana Santa de Jerez 2013, podrá gustar más o menos pero nos queda la satisfacción de que, entre los que de esto saben, ha habido casi unanimidad en calificarlo como una espléndida aportación a la tradición cartelista jerezana. Enhorabuena por ello.
             (Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo 21 de octubre de 2012 y al día siguiente en VIVA JEREZ).

Primer cartel oficial de la Semana Santa de Jerez.

lunes, 22 de octubre de 2012

LAS CRÓNICAS DE AQUEL ESCRIBANO

          
          
 
          DEDICADO A GABRIEL ÁLVAREZ Y A TODOS AQUELLOS QUE DURANTE AÑOS HICIERON POSIBLE EL SUPLEMENTO SEMANAL "COFRADE".
 
 
          Lo llevaba mi hermano Marco en su inseparable carpeta, era el proyecto de un suplemento cofrade para ser publicado semanalmente en Jerez Información, se lo iba a proponer a Gabriel por si era viable sacarlo adelante. Así me lo comentó a mediados de 1997, una década ya, lo vi muy interesante y le animé a que no decayera en el empeño. A los pocos días me comunicó que la propuesta había tenido una buena acogida y que en Octubre saldría el primer número.
   
          El domingo 19 de Octubre se publico por primera vez el suplemento Cofrade, mostraba en portada a la Virgen del Rosario, patrona de capataces y costaleros, y solo cuatro páginas, a las que daban contenido la portada , el palco de Gabriel Álvarez, los apuntes cofrades de Marco A. Velo, el chiste y la opinión de Joaquín Perea, la foto para el recuerdo, las noticias más recientes y el álbum gráfico sobre las obras de rehabilitación de la Ermita de Guía.
   
          Aquel primer ejemplar tuvo tan buena acogida que el número dos sale a la calle con el doble de páginas, añadiendo entrevistas y firmas invitadas. Entre los invitados aparece , en la contraportada, un escribano, como los de antaño, que durante veinticinco semanas fue narrando, con leguaje actual pero sin olvidar la grandiosidad del mundo cofrade, distintas crónicas sobre las vivencias del que siente en profundidad el mundo de las Hermandades y Cofradías.
   
          Las procesiones eucarísticas, el recuerdo a los hermanos difuntos, los cabildos, el tesoro de los hermanos, la reivindicación de un monumento a la Inmaculada, la Navidad, los cultos, los costaleros, la música, los Vía-Crucis, las Juntas de Gobierno, las madres cofrades y la autenticidad de la Semana Santa fueron algunos de los temas que, de forma novelesca, nos hizo reflexionar sobre la realidad cofrade.
          
           Escribano Segundo fue el seudónimo, un recurso muy literario, que escogí para esta tarea y lo hice para que el mensaje no se viese condicionado por el conocimiento del autor, muchas veces analizamos un texto en función de quien lo escribe, relegando a un segundo plano el provecho que podemos sacar de él. Las crónicas, que fueron decimonónicas, porque en aquellos años lo decimonónico, lo antiguo, comenzó a ser actual, a tener vigencia, debían reflejar la realidad del momento, trasmitir un mensaje y ayudar, dentro de la experiencia personal, a una mayor autenticidad en la vida de Hermandad, todo ello sin abandonar la categoría de lo clásico.
   
          Aquella apuesta por la información cofrade, vino , también, en un momento delicado para la cofradías de Jerez, la Unión de Hermandades , con su estructura tradicional había desparecido, las elecciones a Hermano Mayor se estaban politizando, la jerarquía exigía una controvertida formación para ocupar cargos de gobierno, y un Corpus y una Merced sin perspectivas de evolución. El Cofrade fue una ventana abierta a la opinión y a la información, fue la voz ante un silencio que se hacía ya insoportable y , a todo ello, intentó servir Escribano Segundo, compartiendo la experiencia cofrade de veinticinco años de vida activa en una Hermandad que, también, como producto, de su tiempo, vivía momentos confusos.
   
          Hoy una década después , no solo ha cambiado el aspecto físico de los que aparecían junto a su epígrafe sino que también ha cambiado el mundo cofrade, la Unión de Hermandades gracias a la grandeza irrepetible de Lete recobró la estructura y la dinámica con la que fue creada, las elecciones, aunque aún queda camino por recorrer, están siendo cada vez más evangélicas, la formación viene más por la propia necesidad de los cofrades que por la imposición de la jerarquía, y el Corpus y la Merced ha abierto unos caminos antes impensable. Pero las crónicas de aquel escribano siguen vigentes porque son la expresión palpable de un sentimiento cofrade, un sentimiento que no cambia con los años porque forma parte ,más que de un sentimiento de un convencimiento acumulado a base de años de sentir en cofrade y vivir en cofrade.
   
          Este escribano, siempre segundo, porque nadie se puede creer el primero en nada, se suma a esta efeméride del décimo aniversario del Cofrade, con la sana satisfacción de haber contribuido a que esta realidad se haya mantenido domingo tras domingo, regalándonos una información tan demandada como necesaria. Mis felicitaciones A Gabriel y a todos sus colaboradores porque cada domingo, como un nuevo escribano, el Cofrade, sigue levantando acta de la historia. 

          (Artículo publicado en el suplemento EL COFRADE de Información Jerez el domingo 23 de septiembre de 2007 con motivo del décimo aniversario de este suplemento)

 

Portada del primer número de este suplemento cofrade que estuvo en la calle desde 1997 a 2008. Esta primera portada recogía la imagen de Ntra. Sra. del Rosario, patrona de capataces y costaleros, la misma imagen que el pasado sábado volvía a recorrer la calles de Jerez.
(Arriba la cabecera del último ejemplar aparecido)


    

miércoles, 17 de octubre de 2012

FIESTAS PATRONALES


 
El otoño jerezano de 2012 está siendo especialmente festivo. Iniciamos el ciclo con unas Fiestas de la Vendimia que, aunque marcadas por los recortes y la crisis, contó con el balance positivo de los hosteleros del centro de Jerez, sobre todo desde la inauguración la Feria Gastronómica, que llenó la Alameda Vieja y que ayudó también a llenar los bares del centro, incluso ya se habla entre algunos hosteleros “de intentar aprovechar para el año que viene el puente de La Merced. Quizás sería mejor retrasar a la segunda quincena de septiembre las fiestas, para que no haga tanta calor”. El día de la patrona también supuso un lleno total de público en el centro y en aquellas zonas donde pasó la procesión, este año además contando con el ambiente vivido la noche anterior en la calle Merced con motivo de la confección de la alfombra de sal y la velada organizada en la plaza de Santa Isabel frente a la basílica.

Por su parte las fiestas del patrón, San Dionisio, también contó con un lleno total en el centro de la ciudad, el propio Antonio Montero, concejal de Eventos y ‘alma mater’ de la ‘Noche Azul y Blanca’ manifestó lo positivo que es una iniciativa como esta por cuanto favorece al tema turístico y la hostelería del centro y por la respuesta del público a cuantas actividades se ofrecieron para todos los gustos gracias a la ayuda del sector privado, sin cuya ayuda hubiese sido imposible este evento. Para el año que viene se espera que el Museo, ya reabierto, se convierta en uno de los focos principales de interés. “Vamos a seguir trabajando para incrementar la calidad poco a poco y en la medida de las posibilidades”, anunció el concejal.

Y para remate de este ciclo festivo que está viviendo la ciudad, la I Velada de la Virgen del Pilar, patrona de la Hispanidad, que se ha venido celebrando este fin de semana en la explanada de los cacharritos, junto al Parque González Hontoria. Una nueva oferta de ocio y diversión organizada conjuntamente por Ayuntamiento, Asociación de Comerciantes de la zona de la Plaza del Caballo y Torres de Córdoba, y la empresa Cartuja Publicidad & Eventos. Una iniciativa que llega a raíz del éxito que tuvo la Fiesta “Vive el Sur de Jerez”, que se celebró el pasado mes de junio en el Distrito Sur de Jerez, abriendo la posibilidad de organizar eventos similares en los diferentes distritos de la ciudad y que nos recuerda aquella Verbena de la Hispanidad que, en tiempos, se celebraba en la barriada de La Plata, la desaparecida de San Dionisio o esas otras que se vienen organizando en las barriadas por Hermandades y vecinos.

Está demostrado que no es necesario grandes inversiones y ofertas de altura para que los ciudadanos se echen a la calle a disfrutar de su ciudad y de cuantos atractivos ofrece. Lo ocurrido este otoño en Jerez es una prueba evidente de que el centro de la ciudad y los barrios no están muertos, podríamos decir que solo dormidos ante la falta de un buen despertador que lo levante. El abanico de posibilidades es amplio y lo principal es que los ciudadanos han respondido, solo hay que ver como han estado de llenas las calles en donde se habían programadas actividades. Quizás sea el momento de replantearse todo este programa festivo y aunarlo en unas Fiestas Patronales y de la Vendimia que, uniendo historia, tradición y diversión, puedan llegar a ser la gran cita festiva del otoño y no solo en Jerez sino en toda su comarca. Las bases están puesta y la respuesta no puede ser más positiva solo es cuestión de que el éxito se sepa ahora aprovechar.
(Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo 14 de octubre de 2012 y al día siguiente en VIVA JEREZ)
 
Año 1923. Jerez en fiestas.
La foto de abajo está tomada, como la que encabeza este artículo, en la zona del Gallo Azul.
 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

domingo, 14 de octubre de 2012

EL PICUDO ROJO


 
Hubo un tiempo en el que en Jerez apenas había palmeras, fotos antiguas nos muestran una Alameda Cristina  con dos o tres  ejemplares y nada más. No fue hasta mediados del siglo XIX cuando llegaron las primeras palmeras a la plaza del Arenal. Muchos hemos conocido la plaza del Mercado, la avenida Álvaro Domecq y la calle Sevilla sin palmeras. Solo en un paseo del parque González Hontoria cobraban especial protagonismo.

Llegó la invasión de las palmeras y no hubo obra de importancia  que se realizara en el espacio urbano jerezano que no se rematara con una buena dosis de palmeras. Jerez se pobló de ellas, se hizo más tropical y en Navidad eran vestidas de luces y pasaban a formar parte del paisaje belenista jerezano entre Nacimientos monumentales y adoraciones reales.

Este frondoso palmeral en el que se había convertido nuestra ciudad en los últimos tiempos corre peligro. Desde el pasado miércoles se están retirando las palmeras afectadas por la plaga del picudo rojo. Las labores comenzaron en la plaza de Aladro, donde talaron seis troncos y en total serán eliminados un total de 230 fustes invadidos por este insecto.

El picudo rojo proviene del sudeste asiático, llegó a nuestro país a partir de la importación de palmeras desde zonas afectadas. El escarabajo en su fase larvaria va deteriorando la palmera desde su interior, provocando finalmente su muerte. Ataca a diversas especies de palmeras pero, principalmente, a la palmera canaria y la palmera datilera. Vuela en busca de palmeras donde depositar los huevos, sintiendo una especial atracción por los ejemplares con heridas, producidas normalmente por la poda de las palmas, lo que hace que esta plaga pueda extenderse rápida y fácilmente al resto de palmeras de una zona determinada. Los efectos del picudo rojo son "devastadores".

El picudo es una verdadera plaga y además se da la circunstancia que lo rojo está ahora de moda. En el fútbol recordemos a la “La roja”. El color rojo  es el “must” de la temporada e incluso se habla que la agenda oficial de las Princesas herederas pinta en rojo. De este color se apellidaba el ex gobernador del Banco de España Luis Ángel Rojo, considerado uno de los impulsores de la modernización económica de España en las últimas décadas del siglo XX. Por el contrario en cuestiones políticas, no es lo mismo ser un rojo que un rojillo. Al menos para la Real Academia de la Lengua. La institución, marca diferencias no menores entre ambos términos. En el primer caso, la cuarta acepción de "Rojo" dice que, "en política", sería un "radical, revolucionario".  Rojillo es, sin embargo, el que tiene "tendencias políticas más bien izquierdistas". Dicen que el rojo es el color de los valientes, de aquellos que lo dan todo por aquello en lo que creen, el rojo es sangre derramada en post de un fin, sufrimiento por una causa y dolor por una victoria perdida. Dicen también, que es de mala educación escribir con tinta roja, que el rojo solo sirve para marcar los errores. Decía Franz Marc que “Azul es el principio masculino, mixto y espiritual. Amarillo el principio femenino, suave, alegre y sensual. Roja es la materia, brutal y pesada. Siempre se debe combatir el color rojo y vencerlo con los otros dos”. Como ven el rojo da para mucho en un país que parece estar hoy al rojo vivo.

Lo que si es verdad es que contra este picudo rojo, a pesar de ser una plaga muy difícil de afrontar, todavía hay solución por muy brutal, pesado y muy devastador que sea, ya que a este paso y si no ponemos remedio pronto las únicas palmeras que vamos a poder disfrutar, cuando ya no queden otras, van a ser las de chocolate.
(Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo 7 de octubre de 2012 y al día siguiente en VIVA JEREZ)
Grabado decimonónico de la Alameda Cristina cuando aún no contaba con palmeras.



La Avenida Álvaro Domecq, entonces Paseo de Capuchinos, con una arboleda muy distinta de la actual.



La misma avenida en una imagen más actual con una gran vegetación pero sin palmeras como actualmente.
 
  

jueves, 11 de octubre de 2012

LA TORRE DE LA ATALAYA


 
No corren buenos tiempos para el patrimonio monumental jerezano. En los últimos días la alarma ha surgido con la torre de la Atalaya, su preocupante estado de conservación ha obligado a su apuntalamiento.

Los historiadores nos hablan de que esta torre, adosada a la iglesia de San Dionisio, aunque de origen civil, fue construida por el moro Gere Güeber en 1012, siendo reconstruida en el siglo XV, siguiendo los cánones del estilo mudéjar local.

Todas las grandes ciudades tienen su torre emblemática, aquella que por su altura o especiales características, destaca sobre el paisaje urbano entre torres-campanarios o torres-reloj. Famosas son la torre de Babel, la torre Tavira de Cádiz, la Giralda de Sevilla, la torre inclinada de Pisa, la torre Eiffel de París, la torre de los Clérigos de Oporto y tantas otras que son símbolos representativos de las ciudades donde se levantan y focos turísticos de especial importancia.

Nuestra olvidada torre de la Atalaya tuvo un papel relevante en la historia local, por su carácter defensivo, con su famosa campana cascada avisando de la presencia enemiga y su reloj lunar marcando la vida jerezana. Esta torre fue durante siglos la garantía vigilante de una ciudad que no se sentía segura ante los constantes ataques de quienes querían apoderarse de tan atractivo territorio. Por su historia, por su antigüedad, por su estilo artístico y por su privilegiada situación, la torre de la  Atalaya jerezana es otro de los grandes reclamos turísticos olvidados en nuestra ciudad. Los que hemos tenido la oportunidad de subir por sus empinadas escaleras y contemplar la bella panorámica que se contempla al llegar a su planta más alta, podemos asegurar cuánto se pierde Jerez y los que nos visitan al no poder disfrutar de tan excelentes vistas.

La atalaya de esta torre necesita su recuperación para orgullo de los jerezanos; necesita su adecuación como un atractivo más para la promoción turística de la ciudad; necesita reabrir su antiguo acceso directo a la calle para no perturbar el culto de San Dionisio tras su reapertura; necesita ser iluminada como monumento destacado que es; necesita recobrar la importancia que siempre tuvo como torre principal de Jerez, como la torre del Consejo, como la torre de los jerezanos.

La torre de la Atalaya preside la hermosa y romántica Plaza de Plateros, corazón de un viejo Jerez, de gremios y mercaderes, de pajarillos cantarines, de la Viña T y del Nº 1, de recuerdos del ilustre fundador de la Cartuja, Álvaro Obertos de Valeto. Junto a ella la Plaza de la Asunción, una de las más bonitas de España, donde se mezclan y se resume todo el arte jerezano, con ese monumento mariano, único en el mundo, del que dijera Antonio Gallardo: "Dedo que señala al cielo, con el dulce colofón, de un nombre de caramelo: María de la Asunción". Y casi rozándola, esa placita de Belén, coqueta y evoca-dora de la vieja Córdoba que donara aquel potro que la preside y que levanta sus patas como un aprendiz de caballo cartujano entre jardines del Recreo de las Cadenas. En este entorno de lujo, la torre de la Atalaya se alza como columna que mira al cielo, como una madre que mira a sus hijos desde la altura de la madurez y de los años de experiencia, protegiéndoles de ataques y de intromisiones, señalando los tiempos, sufriendo los olvidos y padeciendo sus propios achaques, como el testigo mudo de una ciudad que se pierde entre nuevas plazas, entre calles que se levantan y se vuelven a levantar, entre jardines convertidos en estanques y estanques que vuelven a ser jardines, entre negocios que abren y locales que se quedan vacíos, entre Carrera Oficial que se alarga y se acorta, entre peatonalizaciones y peones a pie de obra.

Desde la Atalaya de esta torre Jerez tiene una visión distinta, más amplia, más clara y más de conjunto, un agradable gozo para los sentidos y una terapia muy recomendable, por eso urge su conservación por el bien de Jerez y de la historia.
(Artículo publicado en Información Jerez el 18 de noviembre de 2006. En estos días la torre de la Atalaya ha vuelto a ser testigo de guerras internas pero, esta vez, por cuestiones salariales, así como de la ceremonia histórica del traslado del pendón de la ciudad.) 
Aspecto que ofrecía la torre de la Atalaya en tiempos pasados. Vemos el aro del reloj que durante algunos años le dio nombre.
 
Fotografía más reciente de la plaza de Plateros, antes de ser peatonal, con la torre de la Atalaya al fondo.


 
 

 

 

lunes, 8 de octubre de 2012

EL SUEÑO DEL PADRE BELLIDO

         
 
           EN LAS VÍSPERAS DE LA FESTIVIDAD DE SAN DIONISIO, PATRÓN DE JEREZ. 
 
          Parece ser que las obras del templo patronal de San Dionisio están llegando a su final y que la próxima Semana Santa podremos ver salir, entre los naranjos de la plazoleta Doctor Revueltas y Montel, a la señera cofradía del Dolor. Se habrá cumplido un sueño de los cofrades de la primitiva Hermandad Hospitalaria y del siempre recordado Padre Bellido, aquel párroco de San Dionisio de eterna sotana, fina figura, voz ronca y gran sentido del humor que se dejó el pellejo para que su iglesia no cayera en la ruina. Don Luis Bellido Salgueró, el cura de San Dionisio, el padre bicicleta como cariñosamente, también, era conocido por sus años pedaleando sobre su viejo vehículo de dos ruedas y por su rapidez en celebrar las misas, estaría hoy feliz de ver que, por fin, perdería de vistas a los andamios y a los palustres que de nuevo tuvieron que invadir su emblemático templo.
   
          El día que se vuelva a abrir San Dionisio la figura del Padre Bellido, inevitablemente, se hará presente en la memoria de todos, porque su carisma aún permanece entre las piedras mudéjares de aquella iglesia, que un día de 1964, tuvo que cerrar porque se le venía abajo y que tras múltiples vicisitudes, siempre con su ingenio por delante, en 1976, logró culminar una restauración que devolvió a la ciudad un templo "mudéjar" que, durante siglos, había enmascarado la reforma barroca.
   
          Se habrá cumplido el sueño del Padre Bellido y, de seguro, que si estuviera presente soltaría algunas de sus genialidades que tanto le caracterizaron en vida; como aquella que estando predicando entre estructuras metálicas y andamiajes, alguien desde los bancos le avisó que una tabla se estaba desplazando, exclamando:" ¡la tabla!¡la tabla!" a lo que el Padre Bellido con su gracia innata contestó: "Uno por uno uno, uno por dos,dos, uno por tres, tres" o aquella otra anécdota que él contaba de cuando le llamó un antiguo Abad de la entonces Colegial para recriminarle y cogiendo el teléfono preguntó: "¿Quien ,es ?, ¡El Abad!, ¿Quien?¡El Abad!,¿Quien ha dicho? ¡El Abaddd!, contestando:" Ya, el Abad, el Abad, pues, a la bim, a la bam a la bim, bom,bam"; o cuando explicaba a los turistas, que visitaban la iglesia aún en obras, que los santos del altar mayor, no es que tuvieran mucho polvo, es que se habían vestidos de Primera Comunión; lo mismo que hacía entender que su iglesia no es que fuera mudéjar sino que era "mu-dejá" o que él era el Bellido barato porque el Obispo era el Bellido Caro, o cuando le pidió a Lora Tamayo, entonces ministro de Educación, que le ayudara a proseguir las obras del templo y este le contestó que eran muchos los monumentos que había en España, a lo que el cura le replicó: "monumentos habrá muchos pero ministro de Educación solo hay uno". La última vez que le escuché predicar decía, que algunos días, acudían menos gentes a Misa que a los conciertos de Juanito Valderrama y Dolores Abril, todo un derroche de arte y de gracia con sotana. Sus feligreses y amigos podrían contar cientos de anécdotas y de ocurrencias del Padre Bellido que quedan para la historia castiza de esta ciudad.
    
          La providencia no permitió que el Padre Bellido tuviera , de nuevo, que pasar el trance de ver San Dionisio otra vez cerrado por problemas estructurales, porque un 5 de marzo del año 2000 cogió por última vez su bicicleta para marcharse en busca del rostro de tantos pobres como socorrió en vida. Aquel sueño que empezó a ver cumplido cuando un día una foto suya en prensa, subido a una escalera y trabajando de albañil, removió conciencias sobre la valía de este templo jerezano, volverá a hacerse realidad cuando la mano abierta y desgarrada del Mayor Dolor traspase la arquería mudéjar del remozado templo y el eco del "Oremos" del Padre Bellido resuene aún en la memoria.
 
          (Artículo publicado en Información Jerez el 15 de noviembre de 2008)
 
El Rvdo. P. D. Luis Bellido, en una foto del ayer, compartiendo grata convivencia con los cofrades del Mayor Dolor.
 

viernes, 5 de octubre de 2012

TETUÁN


 
Tetuán es una bella ciudad de Marruecos, cercana a la desembocadura del río Martín, a 40 kilómetros del sur de Ceuta. Tiene 323.500 habitantes, siendo un reconocido centro intelectual, sede de varias mezquitas, y cuenta con una ciudadela situada en la parte alta de la ciudad, numerosas casas de arquitectura moruna, industrias textiles y un comercio centrado principalmente en la fruta, los cereales, té, lana, el cuero y el algodón. Nada de esto tiene que ver con Jerez. Pues, a esta ciudad marroquí se le piensa dedicar, por parte de nuestro Ayuntamiento, la próxima festividad de San Dionisio, el ahora llamado día de Jerez.

Rebuscando en la historia local, la única relación de .Jerez con Tetuán aparece en el siglo XIX, en Ia nomenclatura callejera jerezana, pero no para honrar a la ciudad del norte de África, sino para memoria del ilustre caudillo don Leopoldo O'donnell, fundador de la Unión Liberal y figura señera del gobierno de Isabel II, cuya presidencia ocupó varias veces, general en jefe de las bizarras tropas españolas en la guerra de África y cuya plaza en Tetuán ocuparon aquellas a su mando. Por Real Decreto le fue otorgado el título de Duque de Tetuán en 1860. Nombre que se le puso, por nuestro Ayuntamiento, ese mismo año, al antiguo Arroyo de Curtidores.

Tetuán fue capital del antiguo Protectorado de España en Marruecos desde l9l3 A 1956 y está unida a la guerra de África y a otras contiendas bélicas entre España y Marruecos. Lo que viene a incidir en un hecho del que ahora se quiere huir, la derrota musulmana ante las tropas cristianas, la supremacía castellana sobre los moros.

Independientemente de lo acertado o no de la dedicación a Tetuán de la fiesta de San Dionisio, signo de concordia es que el día de Jerez celebra su inclusión en los dominios cristianos tras la reconquista morisca, se dedique esta conmemoración a una ciudad árabe. Pero de aquello hace tanto tiempo que remover la historia sirve ahora para poco. Ya los únicos matamoros que quedan en nuestros país son los dos hermanos (con cara de gladiadores), defensores, no de los dominios cristianos, sino de los dominios televisivos y de la memoria de Carmina Ordóñez.

Más eficaz sería que, en nuestra ciudad, se instaurara un día del PSOE y que éste se dedicara al PP. Eso sí que sería un signo de concordia, mucho más necesario que intentar extrapolar lo que ocurrió en 1264 a la sociedad jerezana del siglo XXI. Jerez es una ciudad abierta a todas las culturas y no necesita actos institucionales para afianzar algo que ya está suficientemente consolidado.

Más interesante resultaría un día de Jerez en que los políticos de tendencias distintas se centraran más en lo que les une que en lo que les separa, aunque solo sea por un día. Que en los discursos institucionales de San Dionisio esos partidos se dedicaran a exaltar los valores de los otros con el fin de enriquecerse ellos y, por consiguiente, enriquecer a esa sociedad a la que pretenden servir. Sería el auténtico día de Jerez, la auténtica concordia que se pretende abanderar con ésa dedicación a Tetuán. Se olvidarían no las guerras de entonces sino las de ahora. No las espadas levantadas entre moros y cristianos sino las guerras dialécticas de los políticos de hoy. No los intereses de ocupación de territorios sino los intereses partidistas de ocupación de gobiernos para poner en común, entre todos, gobernando todos, lo mejor de cada uno para que, por lo menos un día, Jerez pueda respirar otro aire que nada tenga que ver con la confrontación y la lucha de los intereses políticos.

Ese sería el auténtico día de Jerez, el auténtico signo de concordia, la auténtica conquista de la ciudad. Mientras tanto, podrán existir dedicatorias a Tetuán por haber ganado la guerra a los moros, o al Poli Egido, por haberle ganado el último partido de Liga, pero todo ello, al final, servirá para poco si deseamos, hoy, la paz y no la guerra.
(Artículo publicado en Información Jerez el 23 de septiembre de 2006. El Ayuntamiento jerezano acaba de designar los nuevos previos "Ciudad de Jerez 2012" en esta ocasión a la ciudad de Cádiz, a la Cámara de Comercio de Jerez y a Cruz Roja Española)
 
D. Leopoldo O,donnell, duque de Tetuán, nombre que llevó durante algunos años la llamada cuesta del Arroyo  por acuerdo del Ayuntamiento de Jerez.
 

 

martes, 2 de octubre de 2012

UNA MEDALLA PARA LA ESPERANZA


 
El que se le de una medalla a la Esperanza es algo además de lógico casi necesario. En estos tiempos en los que tantas cosas hacen perder la esperanza, en los que muchos viven esperanzados en un mundo mejor, en el que la esperanza es lo único que queda cuando las circunstancias se tuercen y la situación se hace insostenible hay que rendir honores a la Esperanza. Y lo hacemos conscientes que esa entrega significa mucho más que un honor y una distinción porque lo hace una ciudad que vive anhelando tiempos mejores, nuevos aires que cambien la difícil  situación que estamos atravesando. En los momentos de dificultades es necesario agarrarse a la esperanza para no desfallecer y caer en la desesperación.

Dicen que la gran enfermedad de este mundo es la falta de fe o la crisis moral que atraviesa. No lo creo, decía José Luis Martín Descalzo,- un hombre que vivió en todo momento sin dejar de sembrar esperanza y vida-, en su libro Razones para la esperanza. “Me temo que lo que está agonizante es la esperanza, el redescubrimiento de las infinitas zonas luminosas que hay en las gentes y en las cosas que nos rodean. ¿Qué va a creer un pobre ser humano que abre los periódicos y sólo encuentra en sus páginas violencia y polémicas y que, cuando abre la tarde o la noche el televisor, vuelve a ver más de lo mismo? Desde el día en que decidimos que era noticia un hombre que muerde a su perro y que, en cambio, no lo fuera el que diez millones de hombres todos los días lo sacan a pasear, hemos logrado convertirnos en algo peor que ciegos: en gentes que sólo tienen capacidad para ver lo negro”.

No es noticia lo bueno que ocurre en el mundo sino todo aquello que mueve al morbo, a lo trágico, a sacar a la luz asuntos íntimos y personales, trapos sucios que a nadie debe importar pero que llenan páginas y páginas de revistas y aumenta sobremanera las audiencias. La basura sigue llenando portados pero las buenas acciones siguen pasando desapercibidas porque parece no interesarle a nadie. Y ante ese panorama de un mundo lleno de problemas, de cosas superfluas que tanto nos hace vivir el presente sin mirar al futuro, poco espacio queda para la esperanza. Pero la esperanza no es fingir que no existen los problemas, es realmente la forma más exacta de encontrar las soluciones, que nos brinda la vida cotidiana. Es la confianza de saber que estos no son eternos, que las heridas curarán, y las dificultades se superarán. Es tener fe, es una fuente de fortaleza y renovación absoluto de nuestro interior, la que nos guiará desde la oscuridad hacia la luz. Ya lo dijo Miguel de Unamuno “Jamás desesperes, aun estando en las mas sombrías aflicciones, pues de las nubes negras cae agua limpia y fecundante”.

Pues todo eso y mucho más es lo que se homenajea entregando una medalla a la Esperanza, porque la Virgen de la Esperanza al recibir la medalla de oro de la ciudad de Jerez no solo recibe el reconocimiento a siglos de historia y devoción, en los que muchos jerezanos han confiado en la fe y en la devoción que profesaban a esta prodigiosa imagen para superar sus problemas, que no han caído en la desesperación porque un día sus mayores o una íntima llamada le enseñaron a confiar en la Esperanza, esa Esperanza que les llevó a comprender aquello de “Lo más increíble de los milagros es que ocurren”. La medalla a la Esperanza es mucho más que un acto protocolario por su Coronación Canónica es todo un mensaje de futuro, es un reconocimiento a esa estrella que nos ilumina en la madrugada, es una luz verde en la oscuridad, es el ancla en la deriva, es la hiedra agarrada al muro de las lamentaciones. La Esperanza es tan necesaria que no solo merece una medalla sino el más grande de los reconocimientos.
(Artículo publicado en Información Jerez el pasado domingo 30 de septiembre y ayer lunes en VIVA JEREZ con motivo de la entrega de la Medalla de Oro de la Ciudad de Jerez a la Virgen de la Esperanza de la Yedra).
Salida procesional de la Virgen de la Esperanza, desde la capilla de la Yedra, el Jueves Santo 22 de marzo de 1940. Por primera vez los cofrades visten el hábito propio de la Hermandad.