La reconquista es un caso único en el conjunto de los pueblos europeos. Una guerra que no tuvo tregua durante casi siete siglos, con una frontera incierta, movediza, que avanzaba cuando tenía la oportunidad de tomar una ciudad estratégica, y retrocedía cuando se reorganizaba el Al-Andalus. La reconquista comienza con la rebelión iniciada por Pelayo en el 718 y termina en Granada en 1492...
Según el filósofo Julián Marías, España por la reconquista «quiso» (durante 7 siglos) ser occidental y cristiana...
Hacia el 911 se pone por escrito la tradición en torno a la figura de Pelayo y su levantamiento contra el poder Musulmán. Pelayo, nacido en Asturias, era hijo del duque visigodo, Favila. Había sido desterrado de Toledo por el rey Witiza. Ingresa luego en el ejército de Rodrigo. Después de la conquista musulmana, el musulmán Munuza, a cargo del gobierno de Asturias, se casa con la hermana de Pelayo y envía a éste confinado a Córdoba. Pelayo escapa, y volviendo a Asturias es elegido rey por algunos cristianos astures y fugitivos del sur. Los musulmanes mandan contra Pelayo una expedición de castigo al mando de al-Qâma y del obispo Oppas. Pelayo se retira a una cueva, luego llamada Santa María o Covadonga. Pelayo acuartelado allí se negó a rendirse, derrotando a algunos de sus perseguidores, y dando a la fuga al resto. Pelayo al parecer, gobernó Asturias desde Cangas de Onís, expandiendo su reino hacia el norte, hasta la costa y luego hacia el este y el oeste, hasta que murió en 737. Esta es la historia que aparece en la Crónica del rey Alfonso III (c. 911).
Jerez, por acuerdo municipal de fecha 19 de septiembre de 1859, tiene una calle dedicada a Pelayo, el rey conquistador, una pintoresca callejuela en la collación del Salvador, una calle que parte de Abades y baja hacia el Arroyo con la torre de nuestra catedral al fondo, torre morisca que nos recuerda aquella reconquista que inició el rey asturiano.
Pelayo es el nombre de aquel mandatario que inició la reconquista y Pelayo el apellido de la nueva mandataria jerezana. La alcaldesa que hoy toma posesión de su cargo y comienza su particular reconquista, tras su periodo anterior en la Alcaldía. La Sra. Pelayo, como la llamaba la anterior alcaldesa,( en esto de bautizar a los contrincantes políticos con distintos nombres es digno de estudio,) tampoco renuncia, como el rey que inició la reconquista, de su carácter occidental y espíritu cristiano. También, como el rey asturiano, nuestra Pelayo, tras su destierro y en sus años en la oposición se negó a rendirse, derrotando a algunos de sus perseguidores, y dando a la fuga a muchos de ellos. Su carisma de líder, como el que tuvo el rey conquistador, le ha llevado al poder, un poder que se inicia hoy y que esperamos todos los jerezanos que sea fructífero, que reconquiste para la ciudad la paz social y la esperanza en un futuro mejor.
Hoy se constituye el nuevo Ayuntamiento jerezano, afortunadamente las luchas encarnizadas con hermanos de otras rezas y religiones son historia. Hoy los enemigos son otros, el desempleo, la droga, la violencia de género y la crisis económica en general, que tan graves consecuencias está acarreando para todos, en especial para esta ciudad que ahora inicia una nueva etapa y que, como en los tiempos de la reconquista, también es necesario de afrontar con espíritu vencedor. La reconquista del empleo y el bienestar ciudadano es un reto para los nuevos munícipes. Un reto para no rendirse ante tantas dificultades como tendrán que afrontar esta nueva corporación municipal que hoy inicia su andadura. María José García-Pelayo, como nueva alcaldesa, tiene desde hoy la oportunidad de iniciar una nueva reconquista, con frontera incierta y movediza, pero que, como ya demostró don Pelayo, solo es necesario gobernar bien para conseguir cuantos objetivos se deseen alcanzar.
(Artículo publicado en Información Jerez el pasado sábado 11 de junio de 2011 con motivo de la toma de posesión de María José García-Pelayo Jurado como nueva Alcaldesa de Jerez)
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Recreación del rey Don Pelayo |
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